La Casa

El Vivero es uno de los rincones mas exclusivos y románticos a orillas de Mar Menor. (Murcia.España) 

En primerísima línea de playa y con 180º de vistas sobre el mar, la propiedad, un antiguo REFUGIO DE PESCADORES, ocupa un magnífico emplazamiento en la ribera sur de un mar interior de aguas tranquilas, muy próximo al Mar Mediterráneo y al pueblo pesquero de Cabo de Palos.
 
Con capacidad para 8-10 personas, la casa se levanta al fondo de un amplio jardín de palmeras, cipreses, hibiscus y buganvillas. Pintada de azul y blanco, su luminosidad evoca el tinte marinero de las islas griegas. Las puestas de sol son espectaculares.
 
El jardín tiene piscina privada con solarium, un porche- cenador para la barbacoa y otro porche-terraza frente al mar. El mobiliario está dispuesto para disfrutar de distintos ambientes a lo largo del día. La cocina exterior con barra de bar, es ideal para desayunos, aperitivos y cócteles al atardecer. Hay parking privado para dos vehículos.
 
En el interior, sus cuatro dormitorios, todos ellos con baño en suite, están alegremente decorados con estilo y nombre propio: Mimosa, Lavanda, Jazmín y Sándalo. Todos tienen vista al mar. El salón es un antiguo invernadero con tres frentes de cristalera que ofrece preciosas vistas al jardín y a la pequeña bahía. La amplia cocina que hace las veces de salón de invierno tiene tambien ventanas al mar y conserva la gran chimenea que en tiempos fué el antiguo hogar.
 
El Vivero es un lugar ideal para vacaciones o celebraciones DURANTE TODO EL AÑO. Éstá situado en el extremo sur del Mar Menor donde se produce un microclima especialmente templado en otoño e invierno. Esta benigna climatología permite actividades al aire libre en cualquier época del año.
 
Desde la misma vivienda pueden practicarse múltiples actividades deportivas: vela, surf, esquí, kite, senderismo, bicicleta y equitación, entre otros.
La Manga Club de Golf (7 km), ofrece tres campos de 18 hoyos que se cuentan entre los mejores de Europa.
 
La carretera local que conduce a la vivienda atraviesa la Reserva Natural de las Salinas de Marchamalo. De Septiembre a Mayo, este paraje protegido se convierte en observatorio de decenas de aves migratorias tales como garzas, cormoranes, patos y flamencos rosa.